No se hace, no -ya lo sé-, eso de alimentar un blog tan esporádicamente como yo alimento éste, pero es que hay periodos en los que todo lo que sale de mis dedos cuando tocan un teclado no es, creo, lo que vosotros esperáis de mí.

Son éstos días de mucho trabajo profesional y de ciertos sucesos emotivos en mi pequeña y rutinaria vida que no me hacen el mejor blogero del mundo.

Susi
De momento, permitidme un pequeño tiempo en mi concha. Es algo que los caracoles hacemos de vez en cuando. Ya vendrán tiempos mejores.

Os muestro aquí, mientras vienen, como pequeño homenaje a su vida con nostros, la foto de la Señorita Susi, que nos ha dejado también en estos días de otoño…

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