Me han regalado una PDA. Invento demoníaco donde los haya.
Un colega se la compró y después de casi necesitar tratamiento siquiátrico por sus peleas con el punterito de marras la arrinconó en un cajón y punto pelota. Tras enterarse de que el perro se había comido mi teléfono -lo juro- se ofreció a regalármela.
Yo, con tal de tener teléfono de dije que ea, que vale, que me la quedo. Pensaba, iluso de mí, que con usarla sólo como teléfono, pues ¿a quién le importa los demás chichis que lleve?
La tengo desde hace 48 horas y ya he perdido..
-2 horas explorando los menús y configurando las conexiones a la red
-3 horas con un jueguito diabólico que lleva.
-2 horas en escarbar por la red y descargar los pertinentes programas para liberarla por si cambio de compañía
-4 horas para leerme las 180 páginas que tiene el manual de usuario,
-1 hora en hacer fotos del perro, que no se estaba quieto el jodío, para ponerlas de fondo de pantalla.
-2 horas en escarbar por la red, descargar e intentar hacer que funcionen los programas de sincronización del windows mobile que lleva con Ubuntu.
-1 hora en buscar, descargar e instalar el software para windows e intentar -sin conseguir- que se sincronize con la PDA.
-1 hora intentando descubrir cómo se escribe la f para que la reconozca como tal y no como g,t,l o vaya usté a saber qué.
-1/2 hora discutiendo con mi hijo el mediano que me la quiere cambiar por su móvil e intentaba convencerme de que yo no le iba a sacar partido y él sí podía llevar los pedidos de las pizzas que reparte mejor que en un papelito.
-1/2 hora discutiendo con mi hijo mayor para que se la diese a él que él sí que le iba a sacar partido en su agenda de exámenes, estudios y clases. (¿para qué querrá el ordenador portátil que lleva a todas partes?)
-5 minutos decidiendo que me la quedo yo y que le den morcilla a los dos.
-15 minutos pidiendo perdón a mi mujer porque me he equivocado de botón y la he llamado a las 8 de la mañana del domingo jodiéndole la única mañana que se puede levantar tarde.

Es asombroso cómo la tecnología nos ayuda y nos ahorra tiempo, oiga.